miércoles, julio 05, 2006

Peluco es un viejito gagá. Me lo demuestra con cosas obvias, como estar durmiendo en una hermosa parva de viruta y de un día para otro decidir armar una nueva cucha justo en el lugar donde estaba haciendo pis...

Debido a eso, ayer le tiré esa "nueva cucha" a la basura.
Lástima, era simpática. Siempre me sobran rollitos de papel de la impresora fiscal, entonces se los había dado para que los desmenuce y haga su propia y blanca viruta. Y le daba un aire carnavalesco a la pecera, había serpentinas blancas por todos lados.

Le quedó la viruta pelada, entonces. Y cual ratón del desierto fue, hizo un pocito, se metió adentro y se tapó totalmente. Fue una forma de decirme: ¡¡¡después de lo que me hiciste, no te quiero ver, desalmada!!!

Pero Pelucón, pensá que es por tu bien: tenés que estar en un ambiente donde la salud sea posible, y dormir arriba de tu pis, es una asquerosidad, dejate de joder.

Después, más tarde, hablamos un rato, cuando se levantó.
Yo le hacía ruidos de conejo y él me sacaba la lengua.

Sí, Pelucón saca la lengua como un viejito que se está acomodando la dentadura postiza: ¡que se sepa!


Lo quiero.



PD: el ojito ya está bien, pero cuando come banana se le pegotea un poco...